El Ministerio de Ambiente realizó talleres y visitas a productores de la cuenca hidrográfica del Río Santa María de Veraguas y La Villa de Los Santos, para la preselección de agricultores que cuantificarán la huella hídrica de sus productos agroalimenticios, todo esto bajo el proyecto Manejo Sostenible de la Tierra y Restauración de Paisajes Productivos en Cuencas Hidrográficas para la Implementación de las Metas Nacionales de Neutralidad de la Tierra (NDT).
Esta actividad cuenta con el apoyo del proyecto denominado Fortalecimiento de Capacidades a Municipios Para Incrementar su Resiliencia ante el Cambio Climático y fue dirigida por la Dirección Nacional de Cambio Climático de MiAMBIENTE, paera dar a conocer a los técnicos y productores las generalidades de proyecto, su importancia y requisitos que necesita para la medición de la huella de agua.
Además, se aprovechó para conocer la disposición de los productores de participar del proyecto, la cual fue bien acogida. Se realizó una visita de acercamiento a productor previamente identificado de la cuenca hidrográfica del río La Villa y se realizó un recorrido en el Instituto Nacional de Agricultura (INA).
Durante los talleres, se sensibilizó a técnicos del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), MiAMBIENTE, productores y actores claves; participaron 27 personas (11 mujeres y 16 hombres), los cuales tuvieron la oportunidad de conocer acerca del programa Reduce Tu Huella Hídrica, y la importancia de la aplicación del cálculo de esta huella en sistemas agrícolas.
Por otro lado, la jornada de sensibilización incluyó a otro grupo de actores claves, como lo son los estudiantes del INA en Divisa, quienes también reforzaron sus conocimientos en la temática de cambio climático, su impacto en el agua y la implementación de la huella de agua como estrategia de adaptación al cambio climático. Estuvieron presente 23 estudiantes (9 mujeres y 14 hombres) de 4to año del INA, en conjunto con sus profesores del plantel.
La evaluación de la huella de agua de productos agrícolas permite estimar el impacto potencial de esta producción al agua de manera integral, tomando en cuenta la cantidad y calidad del agua, y un enfoque de ciclo de vida en los sistemas productivos.
Estos estudios permiten elaborar estrategias de adaptación al cambio climático e implementar mejores prácticas de ganadería y agricultura climáticamente sostenible, de esta forma podemos implementar acciones para el uso sostenible del recurso y la construcción de su resiliencia.
