El Ministerio de Ambiente, con apoyo del programa Euroclima+ financiado por la Unión Europea, desarrolló un Taller “Estrategia Nacional Socioeconómica, Inclusiva, Baja en Emisiones y Resiliente al Cambio Climático de la República de Panamá al 2050 – Conceptos Generales”, donde se presentaron los conceptos generales y el proceso que se estará desarrollando para su elaboración, asegurando el apropiado y temprano involucramiento de los actores clave.
La Estrategia a Largo Plazo de Panamá como también se le conoce, permitirá priorizar acciones, evaluando los costos – beneficios de su implementación, en el marco de las circunstancias nacionales y las necesidades de desarrollo socioeconómico del país. Se identificarán qué condiciones habilitantes son claves para impulsar la descarbonización de la economía e incrementar la resiliencia.” indicó Ligia Castro de Doens, directora de Cambio Climático, durante el taller.
La Estrategias a Largo Plazo de Cambio Climatico representan esa hoja de ruta establecida por los países para descarbonizar sus economías, alinear los flujos financieros con las metas climáticas del Acuerdo de París e incrementar la resiliencia a los impactos del cambio climático en todo su territorio. Es instrumento de política de cambio climático y de planificación sumamente importantes, que se deben desarrollar en un proceso inclusivo y participativo a nivel nacional, ya que permite que todos los actores clave decidan colectivamente qué futuro quieren para su país mientras cumplen con las prioridades de desarrollo sostenible y salvaguardas sociales, ambientales y climáticas.
La Estrategia Nacional Socioeconómica Inclusiva Baja en Emisiones y Resiliente al Cambio Climático de la República de Panamá al 2050, será el documento que dirija la visión de mantener la condición de país carbono negativo, para ello los 10 sectores y áreas priorizados en la CDN1, deben lograr la carbono neutralidad, es por ello que simultáneamente a la Estrategia de largo plazo estamos preparando la CDN2, que nos permita reducir vulnerabilidad e incrementar adaptación y resiliencia al cambio climático, procurando mantener coherencia entre la agenda climática de corto y mediano plazo, y las acciones a largo plazo, además de mantener un enfoque integrado de mitigación-adaptación como eje orientador.
“Es importante recalcar que todas las acciones prioritarias se fundamentarán en escenarios de cambio climático y descarbonización a partir de información actualizada y evidencia científica que se ha desarrollado gracias a la cooperación internacional y al equipo nacional de la Dirección de Cambio Climático” subrayó Ana Domínguez, jefa del Departamento de Mitigación de la Dirección de Cambio Climático.